El puente colgante de Soutomaior es un puente de madera firmemente suspendido por cordones metálicos sobre las aguas del Río Verdugo, a 6 m sobre la superficie del río, concretamente sobre la llamada “Poza das Bestas”, punto de concurrencia de los ríos Verdugo y Oitavén y zona histórica de pesca.
Uno de los accesos al puente transcurre por un camino forestal que une la carretera Soutomaior-Ponte Caldelas (donde puede dejar estacionado el vehículo) y el río Verdugo. El entorno natural del puente colgante está constituido por una tupida vegetación de ribera con meandros secos llenos de cantos rodados y rocas cubiertas de musgo y una acogedora playa fluvial (desafortunadamente, todavía existe abundancia de especies invasoras en el entorno, como el eucalipto, la acacia y la mimosa, pero se han llevado a cabo recientemente acciones de repoblación de especies autóctonas, tales como el roble y el abedules).
Otro de los activos de la zona es una ruta de senderismo circular que comunica el puente colgante con el puente medieval de Comboa, separados por 1 km de distancia. En las inmediaciones de este último elemento del patrimonio arquitectónico municipal también hay espacios para el estacionamiento del vehículo y comenzar desde ahí a pie el sendero hasta el puente colgante. El recorrido se inicia en las proximidades de la playa fluvial de “A Veiguiña Longa” y su área recreativa. La ruta es de trazado circular y de una extensión de 4,8 km. El sendero es de dificultad moderada y pasa por amenos y pintorescos caminos próximos a antiguos molinos, arroyos, pozas y, ¿cómo no?, el puente colgante de Soutomaior.
La observación de la naturaleza, el paseo, el baño y la pesca son algunas de las actividades de las que se pueden disfrutar en esta idílica área recreativa.
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